martes, 20 de marzo de 2018

Percance en la laguna


El 1 de diciembre comencé mi receso laboral que se iba a extender durante todo el mes de diciembre y  mitad de enero por lo que decidí disfrutarlo a pleno haciendo observaciones de flora y fauna. El 5 de diciembre había amanecido con condiciones óptimas y era un día indicado para hacer  observación y fotografía de aves utilizando mi escondite flotante o"hidrohide"en una lagunita que había visto que tenía muy buen nivel de agua y buena cantidad de aves en las cercanías de la localidad de Gorchs, a unos 40 km de mi casa.
Ni bien llegué la actividad  de las aves era muy prometedora, a poco de ingresar al agua pude fotografiar macáes y patos varios, también gallaretas y otras aves acuáticas; otra de mis intenciones era fotografiar los nidos con posibles pichones de algunas especies que había fotografiado dos semanas antes en la salida anterior en ese lugar (ver AQUI)
El resultado no fue demasiado grande en cuanto a la cantidad de especies, pero pude lograr buenos acercamientos a varios patos, mas lo que más me divirtió fue lograr buenas fotografías de un casal de chajá y unas aproximaciones notables a unas pollonas pintadas y un pichón de macá común. La pasé bastante bien, feliz con el resultado, aunque una cosa que no advertí y ya me queda de experiencia es que entre la vegetación flotante y emergida había una innumerable cantidad de jejenes  que me picaban los brazos justo en los mejores momentos fotográficos; no había llevado indumentaria holgada de manga larga en la parte superior y estos insectos me llenaron de ronchas, que son muy molestas porque pican mucho durante varios días y luego queda una marca oscura, un hematoma en forma de punto, que dura más de una semana; de estos tenía decenas luego de salir del agua.
 Pasado el peor momento de los jejenes luego de fotografiar de muy cerca al macá pichón y otras aves decidí salir, ya que había pasado dos horas en el agua y de tanto desplazarme  algunas aves desconfiaban y otras ya estaban fotografiadas, así que fui hacia la orilla para cambiar el objetivo, iba a usar un lente corto para fotografiar posibles pichones en sus nidos, que estaban escondidos entre los juncos y no revisé para no perturbarlos. En ese trayecto un pichón de gallareta apareció pero para fotografiarlo mejor desaté la cámara de la plataforma  flotante donde la llevo siempre e intenté algunas fotos sin éxitos porque se escondió en el juncal;  segundos después una garza blanca me sobrevoló y le hice algunas fotos. Inmediatamente luego de fotografiar la garza sentí detrás mío un sonido extraño, como si fuera un quejido y algo que se arrojaba al agua. Pensé por unos instantes que podía ser un perro de los que vi en dos ocasiones, pero no concordaba esa rara vocalización y el impacto que oí en el agua, como si algo grande se arrojara a la misma y fuera desplazándose a toda velocidad. En una milésima de segundo se me ocurrió que podía ser un carpincho, si bien sería raro allí cerca del camino y en una zona poblada,podía ser posible. Me desplacé caminando unos metros y para más comodidad dejé la cámara sobre la plataforma flotante sin atar y me adelanté para ver vegetación acuática desplazada en el agua, señal de un casi seguro carpincho aunque no lo pude ver; cuando me doy vuelta veo que la cámara justo se estaba cayendo al agua, pienso que por causa de que quedó la correa en el agua y el desplazamiento de la plataforma  por la brisa hizo que se enganchara con una rama que estaba bajo el agua. Intenté llegar pero terminó por sumergirse, no fueron más de dos segundos, pero fue suficiente para que se filtraran dos diminutas gotas en el teleobjetivo de 300 mm. Al instante la apagué, retiré baterías y tarjeta, luego la observé en detalle y tenía filtraciones adentro. No podía ser un momento más inoportuno, ya que a los  5 días tenía un viaje de observación de aves pelágicas y 15 días después tenía que viajar a Brasil y a la provincia de Misiones, donde también iba a tomar fotografías. Debía buscar una alternativa para no desesperar.
Por fortuna tengo otra cámara, una vieja Canon 40D, que no es la panacea ya que su sensor es solo de 10 MP y su obturador no funciona bien, solo tenía que encontrar un objetivo de focal larga. Pregunté por facebook si alguien tenía alguna opinión sobre un lente Canon 70-300 mm que estaba más  o menos accesible para mi y luego de varias respuestas el  amigo Christian Grosso ofrece prestarme un objetivo que no usaba, en realidad fueron dos, elegí el Tamron 150-600 mm que me iba a dar muchas ventajas. Esa misma noche me fui hasta su casa y ya a medianoche lo tenía para poder viajar e intentar tomar fotos. Buen resultado me dio ya que publiqué varias fotos con ese lente, lo que no me convencía era  la 40D; en este interín mandé a Buenos Aires a que me secaran y si era posible repararan cámara y teleobjetivo, proceso que duró casi dos meses, la atención no fue rápida y fue algo descuidada, me dijeron que la  60D no sería arreglada porque la humedad iba a penetrar más y afectar el funcionamiento y el teleobjetivo no tenían una máquina para alinear las lentes una vez desarmado, solo me devolvían como estaba, que mi cámara era posible que dejara de funcionar en un futuro a pesar de las reparaciones; pregunté si funcionaban y me dijeron que sí, solo hice una limpieza de sensor a la 60D y por fortuna todo funciona bien, incluso el lente que quedó con manchitas de las gotas en su interior. Probé el 300 mm y esas manchas al parecer no afectan la calidad de la imagen, o al menos ni se nota, así que usaré todo hasta que algún día cercano o lejano dejen de funcionar. Una cosa es segura, no llevaré más nada a esa casa ni le compraré nada más.
Este percance si bien fue molesto me sirvió para no confiarme tanto y además gracias a ello le compré a Christian el 150-600 mm que me es mucho más útil aunque esa marca no sea la misma calidad que la marca del anterior. no es tan notoria la diferencia, apenas se nota, además de tener un precio mucho más accesible y una magnificación que lo deja muy atrás al anterior, que ahora casi ni uso; lo que más me perjudicó fueron esos viajes con la cámara vieja que salieron con la calidad muy inferior, además de no tener  para filmar, esas dos cosas lamento más. Tenía en mente comprarme un objetivo zoom de esas características, pero este suceso me sirvió para adelantar los tiempos.
Ya he probado el nuevo lente en el agua con excelentes resultados, no tengo miedo de usarlo nuevamente en esas condiciones, solo espero que no me pasen más de estos percances.
Comparto una pequeña muestra de las fotos que obtuve esa bella mañana, en próximos días iré subiendo sobre cada especie en particular.
Macá común (Rollandia rolland) con pichón

Pato zambullidor chico (Oxyura vittata) pichón

Pato zambullidor chico (Oxyura vittata) adultos con pichón

Caracolero (Rostrhamus sociabilis) macho

Pato maicero (Anas georgica)

Pato overo (Anas sibilatrix)

Pato maicero (Anas georgica)

Cigüeña americana (Ciconia maguari). Me sorprendió saliendo de los juncos

Volando en círculos para ver que era eso en el agua (o sea  yo)

Gallareta escudete rojo (Fulica rufifrons)

Gallareta escudete rojo (Fulica rufifrons)

Chajá (Chauna torquata)


Gallareta escudete rojo (pichón)

Chajá

Macá común (Rollandia rolland) pichón

Macá común (Rollandia rolland) pichón

Macá común (Rollandia rolland) pichón

Pato maicero (Anas georgica)

Pollona pintada (Gallinula melanops)


Garza blanca  (Ardea alba)

1 comentario:

  1. It was an amazing experience, unfortunately marred first of all by the biting insects, which can sometimes drive you crazy, and then by the unfortunate incident with your lens. That must have made your heart sink. It looks as though everything turned out well in the end, with the help of friends, and you now have equipment that will serve you well. I know that equipment is not cheap so take good care of it!!

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