Con esta publicación voy terminando con los lugares que visitamos en las vacaciones del mes de noviembre, donde avistamos en total 176 especies de aves en 9 días de recorridos por ciertos sectores de 4 provincias.
Ya de regreso luego de haber estado en las Sierras Centrales, tanto en la provincia de Córdoba como de San Luis atravesamos las extensa llanura pampeana, donde predominan campos de cultivo, con poco de interés salvo sectores puntuales, pero por la ruta del sur de Córdoba que transitamos no encontramos ningún sitio con abundancia de especies, solo ejemplares aislados de aves muy comunes. El sur y norte bonaerense es bastante similar, no teníamos muchas ilusiones pero pasando por Venado Tuerto decidimos luego hacer unos pocos kilómetros más al norte y desviarnos hacia la renombrada laguna de Melincué, donde en su ribera norte se emplaza la localidad homónima. La laguna es célebre porque en invierno durante ciertos años migran hacia ella algunos ejemplares de parina grande (Phoenicoparrus andinus), especie vulnerable a nivel mundial. También hay cientos de flamencos australes y playeros migratorios.
La laguna forma parte de la Reserva Humedal Melincué y además es sitio RAMSAR; muchas aves migratorias hacen escala en este espejo de agua, abarca unas 12000 hectáreas. Sus aguas son salobres y están en los últimos años creciendo sus niveles, provocando inundaciones en zonas de playa y en el mismo pueblo de Melincué. En el pasado (primeras décadas del siglo XX) por las propiedades de sus aguas se habían hecho emprendimientos turísticos pero sucesivas crecientes destruyeron al Hotel Balneario Melincué entre otros proyectos, de los que hoy se pueden apreciar sus ruinas.
A comienzos de la década de 1950 la región todavía no estaba muy antropizada y se había propuesto hacer un parque nacional pero el decreto fue derogado en 1955 luego del golpe de estado militar.
Flamenco austral
Si bien partimos desde San Luis a pleno sol hacia el oriente el tiempo iba desmejorando y ya en Melincué comenzó a cubrirse mucho más e incluso a caer una muy débil llovizna, lo que deslució las imágenes que podíamos tomar. Había una playa extensa y no era sencillo acercarse a las aves, solamente con paciencia haciendo "pasos de ganso" o caminatas cortas agachado, alternando con momentos en cuclillas, lo que provocaba con el paso de los minutos molestias en las piernas.
Las especies fueron muy pocas, exploramos solamente las playas que están a la orilla de la ruta provincial 90 que bordea la laguna y el pueblo, tuvimos que pasar un alto terraplén defensivo que no deja ver las aguas.
Bandada de playerito pectoral y garza blanca entre otras aves
Sirirí pampa
Flamenco austral
Pato gargantilla
Flamenco austral
Pitotoy chico y tero
Tero real
Playerito pectoral
Pato maicero
Cuervillo de cañada
Gaviota gris y una gaviota capucho café
Hicimos algunas tomas panorámicas, de ruinas y del campanario de la iglesia, lo único que pudimos ver del pueblo. También quedó plasmado el "camuflaje" que usé para acercarme a los flamencos... con un éxito discutible, jaja.
Ruinas del hotel Balneario Melincué
Iglesia
Fue la salida final en una larga recorrida por el centro del país, donde visitamos muy bellos e interesantes lugares con variada fauna, flora y ambientes. Dejo unas imágenes con la localización del lugar, la lista de aves observadas y un mapa tomado de la página ecoregistros de los lugares visitados. Utilizamos la página www.ecoregistros.org como sitio preferido para llevar la estadística de nuestras observaciones, ya que no solamente aves se pueden registrar sino mamíferos, peces, insectos, reptiles y muchos taxones más; es muy útil para llevar estadísticas de los primeros registros o "lifers", cantidad de especies de cada clase, especies vistas por cada sitio, tanto propias como de otros usuarios, se pueden bajar listas en excel de casi cada cosa que querramos, y muchas aplicaciones útiles más, cuenta con foro de discusiones muy útil para consultar por especies que no seamos capaces de identificar; se puede utilizar en castellano, portugués o inglés. Recomiendo mucho esta página.
Lugares con registros desde el 3 al 12 de noviembre de 2019.
Total: 176 especies de aves
La lista total se puede ver aquí
Quedan pocos recorridos por mostrar de los que realizamos en nuestras vacaciones en Córdoba y San Luis, esta semana publicaré todos esas travesías fotográficas aunque quedarán todavía series de fotos sobre algunas especies de aves que iré mostrando por varios meses. Mientras tanto voy mostrando algunos recorridos y aves de mi zona o de otras, hasta que se termine el aislamiento preventivo por la pandemia de COVID-19.
El Filo es un sitio en la sierra de Comechingones, en el límite de las provincias de Córdoba y San Luis y que recibe afluencia turística por estar a escasa distancia de Villa de Merlo, ciudad turística con hermosos paisajes, poseedora de la mejor calidad ambiental del país y de uno de los mejores microclimas del mundo; es una pequeña ciudad importante a nivel turístico en el país, con mucha oferta hotelera y diversas actividades, con mucha afluencia de adultos mayores y familias.
Partimos luego de visitar el Monte Whitii del que publiqué hace varios días una entrada, cerca de media mañana, con condiciones óptimas. El camino atraviesa zonas residenciales bonitas que paulatinamente dan paso a un ambiente natural serrano mientras íbamos subiendo, a su vez que el recorrido se iba volviendo muy sinuoso y entretenido para conducir. En el camino hay varios paradores que nos regalan magníficas vistas de Merlo y otras poblaciones cercanas más pequeñas, montes nativos y campos de cultivo, además de las laderas serranas. En esos miradores se pueden ver planeando grandes rapaces, con el adicional que se puede observar allí a la más grande de las aves voladoras actuales: el cóndor andino.
Cóndor andino
Luego de avistar un gran macho de cóndor sobrevolar el mirador donde nos detuvimos, seguimos transitando hasta la parte más alta donde hay un local de venta de artesanías y productos regionales, sitio donde finaliza el pavimento y continua un camino de ripio, lugar que marca el límite de San Luis y comienza Córdoba. Seguimos por camino de tierra hacia un parador varios kilómetros más adelante y se denomina Mirador de los Cóndores. Llegamos hasta las puertas pero no nos atrajo mucho y decidimos con más tino explorar las laderas rocosas en busca de aves serranas.
Mirador de los Cóndores
Estatuilla de la Virgen en las rocas.
Las especies de aves en estas alturas no son demasiadas, hay varias conocidas que viven en tierras bajas como la loica o la cachirla pálida, que si bien está en la región pampeana donde habitamos en la sierra nos sorprendió su abundancia, otro muy abundante en la sierra es el pico de plata que en tierras bajas se asocia a humedales, infaltable el chingolo; en cambio hay especies endémicas de las sierras que no viven en otro lugar, salvo durante la época más cruda del invierno cuando hacen migraciones hacia regiones cercanas y más bajas, como yal chico, yal plomizo, espartillero serrano, remolinera chocolate entre otras.
Pico de plata (macho)
Cachirla pálida
Cachirla pálida
Yal chico
Espartillero serrano
Remolinera chocolate
Yal plomizo (hembra)
Yal chico
Chingolo
Loica común (macho)
Loica común (macho)
No nos dedicamos solamente a ver aves sino también a contemplar las hermosas vistas y tomar fotografías de lo que se observaba metros más abajo.
Villa de Merlo
Centro de Merlo
Vista de uno de los tanto Hoteles Howard Johnson que hay en el país, muy cerca del Monte Whiti que se alcanza a apreciar un poco
Llegando el mediodía descendimos por el camino y en algunos paradores nos detuvimos a tomar fotos, no es seguro detenerse en otro lado porque casi no hay banquinas y el camino es muy sinuoso y está transitado, aunque hay algunas vistas imponentes que bien merecen alguna instantánea.
Subiendo
Bajando
Un rinconcito en el camino me llamó la atención y me gustó mucho, era hermoso verlo pero mejor aún con la perspectiva cambiante mientras íbamos en movimiento, la imagen es un pálido reflejo de la realidad.
Es un trayecto recomendable para todo visitante de Merlo, por lo atractivo de la ruta, los paisajes, las aves para los que nos gusta observar, para fotógrafos e incluso para los que les gusta transitar caminos sinuosos. Se asciende en un tramo de 8 km si lo medimos en línea recta desde los 850 msnm en los que se sitúa el centro de Villa de Merlo hasta los 2100 msnm donde se ubica el Filo. La longitud del camino descrito es de unos 15 km.
Fue un recorrido estupendo del que volvimos muy contentos por lo vivido. Luego de almorzar en un restaurant céntrico fuimos al hotel Torres del Sol donde nos hospedábamos para descansar un rato, desde donde teníamos una magnífica vista de la sierra. El lugar es recomendable, nos gustó, nada que ver con el lugar donde nos hospedamos ni bien llegamos a Merlo dos días antes, a las 22 horas; entre el cansancio y las ganas de hospedarnos en algún sitio hicimos una mala elección y fuimos a parar al hotel Aguada del Zorro, que está al lado de un casino, lugar además de ruidoso, ruinoso, una vergüenza, que salía casi lo mismo que un hotel más que decente y con más servicios, no recomiendo para nada el último lugar.
Por la tarde recorrimos un camino que lleva hacia la localidad de Carpintería desde donde hicimos unas fotos del camino al Filo y de uno de los paradores. Salimos a avistar aves pero por las tardes a mediados de noviembre se ponía muy ventoso y no se veía nada de mucho interés. Finalmente retornamos a la ciudad y a la tardecita nos relajamos disfrutando de unas buenas cervezas artesanales y ricas comidas en una cervecería céntrica.
Camino al Filo
Mirador de los Cóndores
Viendo Youtube instantes antes de redactar esta publicación encontré un vídeo que muestra el camino al Filo de punta a punta